Los productos Lácteos lideraron el alza de precios de la canasta de bienes de consumo masivo del año pasado. El precio pagado por unidad de compra fue un 20% mayor respecto a 2021. Además, muchos de sus productos son considerados indulgentes, teniendo su consumo reducido en momentos de crisis.
La presencia de estos productos en las ocasiones de consumo de FMCG cayó un 4%; también fue la que más sufrió pérdida de volumen de compra y penetración en la región.
Un dato importante es que se trata de la única categoría que tuvo un desempeño negativo en todos los países latinos analizados en el informe, incluso en economías con menor impacto social de la inflación. En Brasil la caída fue de 1,6% en volumen, mientras que en Bolivia, Centroamérica y Ecuador esta cifra saltó a -9%, y en países como Argentina, Chile y Colombia la disminución fue de 4%.
Ante el impacto social de la crisis, hay formas de racionalizar
A pesar de perder un 25% tedel poder adquisitivo en los últimos dos años, principalmente por la inflación, los consumidores latinos lograron cerrar 2022 estables en la adquisición de bienes de consumo masivo.
Los latinos intentan no eliminar categorías básicas que componen su carrito de la compra, buscando opciones más económicas, comprando menos artículos por viaje y diluyendo las compras en más canales. Esta es una pista de por donde los productos Lácteos pueden encontrar oportunidades.
Considerando la gran diferencia económica entre los países de la región, que genera distintos escenarios de consumo, tomamos como ejemplo México y Colombia. Ambos países presentan caídas en la canasta de Lácteos, pero Colombia muestra una tendencia más acentuada.
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